domingo, 19 de diciembre de 2010

PRIMER AÑO DE LA REVOLUCIÓN EN NUEVITAS .

Por MSc. Ricardo Ferrer Aluija.
El primer día del mes de enero de 1959, ha pasado a los anales de la nación cubana como el ¨ Día de la Liberación Nacional ¨. Muy pronto el devenir de la isla se vería sacudido por una avalancha humana que se proponía imponer una mayor equidad en el menor tiempo posible. Nuevitas no escapó de esa dinámica y en pocas horas se produjo la Toma del Cuartel Oscar Primelles por Tropas del Ejército Rebelde apoyados por la Célula del Movimiento 26 de Julio bajo la dirección del Capitán Jerónimo Suárez Acosta.
El cuatro de enero de ese año, se produjo la entrada de Fidel a Camagüey, día en el que se estableció el poder revolucionario aquí, apareció entonces la primera dirección política , nombrada Casa del Movimiento 26 de Julio de la que fue su coordinador Ernesto Salcedo Socarras. El 29 de enero de 1959 se estableció la primera forma de Gobierno Revolucionario, por la Ley 36, mediante la cual la administración en el territorio quedó integrado por tres comisionados: Armando Castillo Etcheverry, Luis Sainz Noval y Andrés Rodríguez Sánchez. Por otra parte el Comité Ejecutivo del Movimiento 26 de Julio desarrolló reuniones en los comités de barrios, que entonces eran: Senado, Lugareño, Redención y Alvaro Reynoso para conocer las necesidades que presentaban esos territorios desde el punto de vista económico, político y social.
El día 11 de enero de ese año quedaron cesantes el Alcalde Emilio Fernández Guach y sus 15 concejales, el que hizo entrega oficial del ayuntamiento al gobierno revolucionario el 14 de enero de 1959, razón por la cual las fuerzas revolucionarias le reconocieron su actitud demostrada en la ayuda a los revolucionarios nueviteros durante la lucha contra la tiranía de Fulgencio batista, por lo que se le rindió homenaje en el antiguo Teatro ¨Angela¨.
El día 18 de ese mes y año fueron exhumados los restos de los mártires locales Luis Fernández Quiroga y Ángel Gutiérrez Núñez, y fueron expuestos sus restos en el antiguo Colegio Médico - actual policlínico Francisco Peña Peña – klo que devino en demostración de duelo, el cortejo fúnebre fue acompañado por más de 400 mujeres vestidas con blusa roja y saya negra, colores de la bandera del Movimiento Revolucionario 26 de Julio.
En marzo se produjo la reorganización del Ejecutivo del Comité Municipal del Movimiento 26 de Julio y fue elegido coordinador Héctor Conde Oña, actualmente vicepresidente de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana en el municipio en tanto el día 30 de ese mes fueron intervenidas todas las organizaciones obreras y la Federación Obrera Marítima Local, las que respondían a los intereses de la oligarquía nacional y regional .
El 2 de febrero, coincidiendo con la celebración del aniversario 445 de la funbdación de la villa de Santa María del Puerto del Príncipe, fue inaugurado el primer Comedor Escolar y el 17 de mayo al promulgarse la Primera Ley de Reforma Agraria, fueron expropiadas en el territorio las tierras de 65 propietarios, con un total de 801 074 caballerías, al tiempo que 74 campesinos recibieron el titulo de propietarios.
En agosto de 1959 visitó Nuevitas Pastorita Nuñez Directora del Instituto Nacional de Ahorro y Vivienda, orientando la construcción de 100 viviendas. Ese año se produjeron conflictos entre obreros y la patronal de la compañía Sinclair. Se produjo la paralización de la Industria del Henequén, se declaran en huelga de hambre por el no pago de su salario por parte de sus patrones, mientras veía la luz una ardua lucha por agremiar a los “Caballos” del Puerto.
En octubre 1959 El Jefe del Departamento de Orden Público determinó, por orientación del Gobierno Revolucionario, clausurar dudosos bares y prostíbulos, culminando así la penosa historia del Marinan Bar, Barchiplan Bar, Americam Bar, Escorbar, Tonybar, Dominó y el resto de los prostíbulos, entre los que se encontraba el tristemente celebré Casa de la Felipona. Este sería el aporte de Nuevitas al principio del fin del capitalismo en Cuba.

PUBLICACIÓN DE NUEVITAS EN PRELUDIO DEL TRIUNFO REBELDE.

Por MSc. Ricardo Ferrer Aluija.

Apenas se recuperaban de las copas que por la ¨ nochebuena chiquita ¨ habían consumido junto a suntuosas cenas lo representantes de las clases más acomodadas de la ciudad, cuando al amanecer del día siguiente, 9 de diciembre de 1958, los pregoneros de periódico anunciaban un nuevo número del bisemanario ¨ El Pueblo ¨ que se imprimía en esta localidad.

El número 51 del año 46 de la publicación impreso periódico de referencia, acogida a la franquicia postal como Correspondencia de Segunda Clase en la oficina de correos de Nuevitas, en su primera plana enunciaba como titular ¨ SE REUNE MAÑANA EL CONGRESO ¨, en el que daba cuentas de que el Congreso en Sesión Extraordinaria se reuniría para declarar nuevamente el Estado de Emergencia Nacional, para lo cual ¨ se ha citador a los señores legisladores de ambos cuerpos ¨.

Lejos estaban de imaginar los que elaboraban aquella noticia en clara alusión al avance indetenible de las tropas del Ejército Rebelde, que apenas restarían unos días para que el pueblo se coronara de glorias y compromisos con el triunfo de la Revolución el primero de enero de 1959.

Aquella publicación había sido fundada el 1ro de junio de 1912 por Guillermo Arrebola Villavicencio, en tanto fungía como director-administrador Manuel Arrebola Magariño, su subdirector era Aníbal de León González y su Jefe de redacción Esteban Lamela Maura.

El impreso periódico, salía los martes y viernes. La suscripción anual costaba seis pesos y mensual era de 60 centavos, mientras cada número suelto costaba cinco centavos y su redacción y administración estaba fijada en un local de la esquina de las calles Máximo Gómez y Carlos Manuel de Céspedes de esta localidad.

Un dato curioso: en su página 3 de ese número aparece una columna bajo el titular que enunciaba ¨ Sabía Usted ? ¨, en la que se asevera que en Estados Unidos se vendían más de 20 millones de herraduras al año, que la ciudad del mundo que había registrado el mayor número de relámpagos era Ciudad ¨ Buffalo ¨, en ese mismo país, la que obtenía el record mundial de ese fenómeno natural con 354 relámpagos en 44 minutos. Como se aprecia, toda la información correspondía a aquel país que desde el cese de la dominación española se había convertido en potencia neocolonial de la isla.

La crónica social abarrotaba las columnas de aquel bisemanario, bautizos, bodas y servicios religiosos., además de un atropellado tumulto de propaganda comercial- claro para los que podían gastar - , además de la cartelera de los teatros ¨ Bartholet ¨, ¨ Ángela ¨ y ¨ Niza ¨, poco visitados por entonces por la represión que por desató el ejército de Fulgencio Batista. No imaginaron los columnistas de aquel periódico que dejaban constancia de los últimos días de un pasado excluyente que tuvo su fin con el paso arrollador de ¨ los barbudos del Ejército Rebelde ¨ que junto al pueblo hicieron posible aquel amanecer de victorias.

EXQUISITA MONTERÍA DE FIN DE AÑO.

Por MSc. Ricardo Ferrer Aluija.

Cada fin de año la familia nuevitera, como sucede en toda la geografía cubana, se propone despedir el período que termina, oportunidad en que se pasa balance a las metas laborales y personales en el reiterado empeño de avanzar, además de saludar el advenimiento de un nuevo aniversario del triunfo de la Revolución, ocasión en la que no puede faltar la tradicional comida que se consume en el especial convite.

Generalmente los lugareños prefieren despedir el año degustando un exquisito pernil de cerdo asado, junto al congrí –arroz con frijoles negros-, yuca con mojo elaborado con manteca del propio puerco y ajos macerados y la ensalada de ocasión en la que por lo general no faltan los tomates y lechuga, pero desde las últimas horas del ¨ año que se va ¨ ya se piensa en el amanecer del nuevo año, en el que no puede faltar la popular ¨ montería ¨.


La montería criolla, muy consumida aquí, es un alimento que tiene como base el cerdo que ha quedado asado de la noche del día 31 del último mes del año, grasa caliente y sofrita en ella las cebollas, los ajos, el pimiento verde y agregan los restos de cerdo, hasta que se doran y adquieren un bouquet especial.

Dicen los nativos más experimentados en la elaboración del arraigado plato, que el toque de distinción se lo da a la ¨ montería ¨ el pimiento o ají verde, que al sofreír, otorgan a la carne especial sabor que invita a ser consumida, lo que se hace acompañando arroz, vianda y alguna ensalada elaborados en la mañana del primer día del nuevo año.

Otros aquí, prefieren ¨ partir el año ¨ cenando con pescado asado, acompañado por congrís, yuca y ensalada como se acostumbra cuando se consume el cerdo asado, ocasión en la que se procura consumir algunas cervezas que hagan más agradable al paladar el esperado marisco.

Algunos, cuando quedan masas del pescado asado en la noche del 31, lo conservan en el frío para elaborar en las primeras horas de la mañana una ¨ montería especial ¨, elaborada al pasar por una cazuela al fuego ají y otros aliños en los que se sofríen y son consumidas con ¨ casabe ¨, pan u otras combinaciones.

Llega así hasta nuestros días, la ¨ exquisita montería ¨, como exponente de nuestra cultura culinaria, que se ha visto enriquecida por la herencia cultural que se nos ha legado, a la que se le añaden importantes componentes locales, en lo que ha devenido en un verdadero plato popular.

NUEVITERAS CON PRESILLAS PARA PELOS A INICIOS DEL SIGLO XX.

Por MSc. Ricardo Ferrer Aluija.

Las dos primeras décadas del siglo XX nuevitero, conoció de la presencia de jóvenes muchachas, que pese a los cánones de la entonces pequeña y apartada ciudad de entonces, trataban de lucir una agradable presencia para lo cual prestaban especial atención a su apariencia personal. En ese empeño, sobresalió el interés en mostrar el cabello rizado, cuando muchas de las féminas eran portadoras de un laceo cabello.

Aquella etapa, signada por un abarrotamiento de artículos procedentes de Estados Unidos de América, cuyo dominio en el comercio nacional y local era preponderante por entonces debido a la influencia derivada de la ocupación militar y posterior instauración de la república mediatizada, hizo posible que hasta este paraje llegaran singulares presillas de pelo, con el único propósito de lograr ondulaciones en el cabello de aquellas damiselas de pelo laceo.

Las presillas, vendidas en diferentes tamaños, para que fueran compradas en correspondencia con las pretensiones de cada muchacha, mostraban la inscripción ¨ Made in USA ¨ y eran colocadas en el cabello húmedo de modo tal que al pasar unas horas y al perder la humedad, quedaran las ondulaciones deseadas en el pelo.

Muchísimas muchachas de aquella sociedad, al cabello húmedo, incorporaban la sustancia viscosa que producía la fruta del ¨ateje´ para lograr una mayor permanencia de la ondulación en el cabello, de modo que la brisa marina imperante en la ciudad, no deshiciera el peinado logrado.

Entonces no existía aquí el llamado ¨cold ware ¨, el que apareció décadas más tarde con un imponente artefacto de un largo pies metálico en cuya parte más alta contaba con una significativa circunferencia de la que pendían numerosos cables de corriente en cuyos extremos se adhería una presilla que hacía, mediante una resistencia, producir el calor suficiente que permitiera el rizado del pelo.

A mediados de siglo, apareció el ¨ líquido de permanente ¨, que facilitó el empeño y sólo basta colocar unos moldes cilíndricos en el cabello y humedecer con la química referida y después de unos minutos, el cabello puede ser enjuagado, quedando la ondulación producida por el procedimiento. Quedaban así atrás las quemaduras que en el cuero cabelludo se en el tiempo del llamado permanente eléctrico.

Luego se impondrían diferentes tendencias en el peinado de las lugareñas, unas veces haciendo galas del impecable cabello laceo y otras, mostrando las ondas que hacían mostrar una imagen diferente y renovadora, obsesión en la cual, marcó un importante momento aquellas primeras presillas de pelo, que permitieron a las nativas mostrar sus peinados ¨ con vueltas ¨, para exhibir su belleza en el principal parque o la arraigada ¨Alameda¨.

EL NEGRITO DEL TEATRO ¨ CAMPOAMOR ¨ DE NUEVITAS.

Por MSc. Ricardo Ferrer Aluija.

A Francisco Covarrubias (1755-1850) se le atribuye el nacimiento del teatro nacional, pues gracias a él comenzó a hablarse "en cubano" en los escenarios de la isla. El introdujo además el personaje del "negrito", que como el "chino" y el "gallego" sería muy significativo en el teatro vernáculo. Lo singular resulta que casi un siglo después, el teatro ¨ Campoamor ¨ de Nuevitas, contaba con un ¨ negrito¨ del terruño.

Arquímedes Pous (1891-1926) uno de los más grandes cubanos consagrado al teatro, fue el negrito por excelencia del teatro bufo criollo en su etapa de máximo esplendor, el primer cuarto del siglo XX, cuando la radio estaba por nacer y la televisión era prácticamente era impensable.

Enrique Arredondo, a los diecisiete años debutó en el teatro asumiendo el personaje del famoso Negrito de la tríada bufa cubana: el negrito, el gallego y la mulata, representándolo en el teatro ¨ Campoamor ¨ de la localidad. Hasta el año 1957 estuvo en las tablas el popular actor cubano, actuando en varias compañías; hasta llegar a ser empresario y director de nuevas agrupaciones para las que escribió una buena cantidad de sainetes y revistas. Fue esa la etapa en que apareció el ¨ negrito ¨ de Nuevitas.

Ángel Adalberto Lamela Maura, que había nacido el 11 de agosto de 1913 en esta ciudad de la costa norte de Camagüey, se desempeñó en diversos espectáculos presentados en el emblemático teatro al que acudía el público a apreciar dramas, comedias, zarzuelas y operetas que venían aquí a su paso por la comarca en giras por todo el país. Los lugareños tuvieron el privilegio de ver presentaciones del teatro bufo, con sus personajes, entre risas y música, que referían la frustración republicana, pero el ¨ negrito ¨ que representaba este nativo otorgaba un ambiente especialmente familiar en la relación que se establecía entre actor y público.

Memorable fue la actuación de Ángel Adalberto como ¨negrito¨ el lunes 7 de enero de 1957, cuando en la segunda parte del programa elaborado por el teatro ¨Campoamor¨ a partir de las ocho de la noche, se presentó el sainete ¨ El Solar Atómico ¨, un cómico de actualidad, original del también nuevitero Enrique Juan Casado, el que hizo poner de pie al auditorio en medio de los vítores y aplausos de los presentes.

Lamela Maura, fijó su residencia en La Habana en 1967, lugar donde falleció el 18 de febrero de 2002, pero con su arte, regó la cimiente de sucesivas generaciones de teatristas que continuarían la obra, enriqueciendo el legado escénico del más auténtico teatro local y cubano.

SINGULARES AUTOMÓVILES EN LAS CALLES DE SAN FERNANDO DE NUEVITAS.

Por MSc. Ricardo Ferrer Aluija

El norteamericano Henry Ford se decidió a producir automóviles en la década de 1890 del pasado siglo XX. En ese país, George Baldwin Selden obtuvo en 1895 una patente que cubría la aplicación a un vehículo de un motor de combustión interna. La patente fue asignada a la empresa Electric Vehicle Company en 1899, pero otras, encabezadas por Henry Ford, se negaron a hacerlo. El proceso judicial se inició en 1903 y terminó en 1911 —un año antes de que expirara la patente— con un veredicto favorable a Ford. Ello provocó tal auge en la producción de estos automóviles, que un lustro después ya por la ciudad se paseaban varios de estos equipos.

A aquellos primeros automóviles que conocieron los nueviteros se daba el nombre peyorativo de ¨ fotingo ¨ pues se consideraba que eran baratos y de mala calidad, a tal extremo que sirve en nuestros días para designar un coche viejo y descompuesto.

Damiselas con largo atuendo, generalmente blanco o de color claro, con hermosos bordados realizados a mano cubiertas con pamelas de largas cintas que flameaban al aire, eran acompañadas en un inolvidable paseo en ¨ fotingo ¨, por los mozalbetes de sobrio vestir en los que sobresalía en traje de cuello y el sobrero que por entonces era usado con distinción.

Entre 1913 y 1915 en la fábrica de Ford de Highland Park se combinaron la producción normalizada de piezas de precisión y la fabricación en cadenas de montaje, que simplificaba las operaciones. La eficacia de la producción era tal que los precios de los automóviles bajaban sin cesar.

Entonces y muy cerca de 1920, se registró en la ciudad el mayor número de aquellos primeros Ford, que se convertían en una sensación. Tal fue la algarabía del acontecimiento, que muchos, llenos de expectativas, se concentraron en la principal calle de la ciudad para presenciar un acontecimiento ¨ insólito ¨ : la primera mujer que conducía un automóvil por las calles de la villa. Era nada menos que la hoy muy popular actriz María de los Ángeles Santana que por entonces residía aquí.

Singulares eran los paseos de los llevados y traídos ¨fotingos¨ en las fiestas del San Juan, en los que eran engalanados con flores, sobre todo de flamboyán, para que jóvenes y sonrientes lugareños y lugareñas, recorrieran las principales calles en un ocurrente recorrido de disfraces con antifaces y capas, a la vez que se hacían sonar maracas en medio de la algarabía citadina en la que sobresalía el cencerro de las congas.

Ha quedado atrás aquel tiempo de los hoy ¨ anacrónicos fotingos ¨, pero las calles del viejo San Fernando de Nuevitas saben que por sus adoquines pasaron a la sazón convertidos en sensación, en tanto las amarillentas fotos de la época han quedado como testigos de aquellos días en que proliferaron por la ciudad esos singulares automóviles

SECRETOS DE ¨ CONFIDENTES ¨.

Por MSc. Ricardo Ferrer Aluija.


La Ergonomía, estudia los datos biológicos y tecnológicos aplicados a problemas de mutua adaptación entre el hombre y algunos de los más importantes bienes materiales con los que interactúa. Esta ciencia, entremezcla su saber con la Antropología y se dedica a estudiar el mobiliario que se ha utilizado en el devenir histórico-social. Entre los inusuales artefactos con los que contó la localidad, se encuentra ¨ el confidente ¨.

Este es un mueble muy curioso, se trata de un tipo de sofá de dos asientos, cuya forma permite a una persona sentarse frente a otra, lo que sin dudas se convertía en un verdadero aliado de los añejos ¨ tórtolos¨ que bajo la égida de tiempos pretéritos, pasaban noviando un largo tiempo.

Aún en la localidad se conservan ¨ confidentes ¨ tapizados con curioso damasco floreado o color entero de inicios del siglo XX, pero los más utilizados eran aquellos elaborados de madera preciosa, con ¨ pajillas ¨ en so fondo y respaldo. También se utilizaron muchos con curiosas tallas en madera entre las que sobresalían las figuras de hermosos ¨ Cupidos ¨, que servían de ambientación al principal valor utilitario del mueble.

Fastuosos ¨ confidentes ¨ exhibían junto al brillo de su madera, delicadas incrustaciones en nácar o hueso, en tanto sus patas variaban de forma en correspondencia con el estilo utilizado en su fabricación.

Las señoritas del pasado siglo, ataviadas de larga indumentaria, esperaban ansiosas al pretendido galán que la acompañaría unas horas en la noche, sentados en aquel antojo de nido de amor que todos conocían como ¨ confidentes ¨.

Aun se conservan en la ciudad algunos de estos elegantes muebles cuyo uso parece quedar atrás en un siglo en el que la modernidad se impone, pero no deja de constituir todo un hermoso legado de prácticas de una época de encuentros y desencuentros, amores y desamores.

Llegan hasta hoy los curiosos ¨ confidentes ¨ como testimonio de una época llena de formalidades, pero al mismo tiempo de rico acervo cultural y social que ha dejado una marcada impronta en los lugareños.