lunes, 20 de agosto de 2012
CRIOLLOS EN NUEVITAS.
Por MSc. Ricardo Ferrer Aluija.
Durante la etapa de 1515 a 1689 la población que habitó la bahía de Nuevitas estaba fuertemente mezclada, aunque la mayoría habían nacido en el país. En ese periodo presentaron sus perfiles los criollos, un nuevo tipo social diferente a sus progenitores españoles, africanos e indios. Este fue el resultado de la mezcla, selección y creación de los elementos humanos y culturales que convergen en la Isla. Sus rasgos identitarios fueron conformándose a través de la interacción con el medio natural, social y espiritual, es decir, sus gustos, costumbres, tradiciones, hábitos, modo de pensar y actuar responden a las necesidades e interés surgidos en el medio social y cultural.
A fines del XVI e inicios del XVII encontramos en Nuevitas, como en el resto de la isla, tres fueron las culturas, que se fueron mezclando y aportando sus características esenciales. Transcurrieron años, es decir varias generaciones, para que se extendiera, de nuevo, el proceso de formación del criollo. No obstante aquella masiva introducción de la nueva población enriqueció el mosaico étnico citadino y amplió su horizonte cultural. En este período se inició la verdadera conquista del espacio geográfico cubano. Ese proceso resultó más intenso, al inicio, en el occidente del país, ya a mediados del XIX en la zona central y solo a finales de ese siglo y las primeras décadas del XX en el amplio espacio camagüeyano oriental del cual forma parte Nuevitas.
Aquí, como en otros lugares, fue conformándose los grandes complejos socioeconómicos regionales, de los cuales Nuevitas constituye una subregión del Camagüey y que configuraron economías, comportamientos sociales y culturas, que fueron conformando redes interactuadas de zonas productivas especializadas, pueblos, villas, ciudades y ciudades-puerto. Por ello en materia de historia regional, nuestra subregión descolló por los elementos que le dieron origen y devinieron en su consolidación.
En la segunda mitad de del siglo XVIII se desarrolló aquí como en toda Cuba un proceso económico-social e ideológico en extremo complejo, por el modo particular de proyectar sus ideas y, sobre todo, por trastornar la composición social y los paradigmas de la sociedad criolla. Ese proceso se caracterizó por las profundas separaciones del aparato político administrativo; la libre y masiva introducción de esclavos africanos; la reorganización agraria en la extensa zona rural de la subregión nuevitera y el auge de la plantación esclavista; la desarticulación demográfica de la sociedad criolla y, en consecuencia, su remodelación sociocultural; la creciente inserción del país desde aquí en el mercado mundial capitalista con sus producciones básicas.
En el siglo XVII, el criollo aquí como en toda Cuba se caracterizó por contar con un pensamiento autóctono, tomó conciencia de sí mismo, sin embargo no negaba su españolidad, pero se autorreconocía como algo diferente al español, apareció el concepto de Patria referido al ámbito geográfico cultural que lo rodeaba, emergió una conciencia histórica regionalizada, pero que expresa el arraigo del criollo a la tierra como primer peldaño en el proceso de formación del cubano con énfasis en lo que lo identificó como nativo de Nuevitas, desarrolló un sentido de pertenencia a una comunidad de intereses y aspiraciones afines, valoración con orgullo de los encantos de la naturaleza y su fertilidad lo que lo identificó con su medio, por otra parte denotó una exaltación de las cualidades físicas e intelectuales del criollo y su capacidad del servicio.
Debido a su contenido y expresión formal, el pensamiento criollo del XVIII constituye un puente entre la escolástica y la ilustración, representantes del feudalismo decadente y la burguesía naciente respectivamente, por consiguiente, la cultura criolla surgió en cierta oposición con la escolástica y la hispanidad, en tanto que fue un producto de ellos. El hecho de que surgiera una comunidad propia evidencia un rompimiento con el poder de la escolástica y la unidad del imperio, por ello, la cultura criolla es resultante del contexto escolástico en que se desarrolló y apuntó hacia un puente con la ilustración.
No cabe dudas de que la formación del criollo tiene sus primeros gérmenes en la mezcla de tres culturas que conforman el tronco de nuestra identidad: la aborigen, que aportó fundamentalmente elementos del lenguaje y algo de su dieta alimentaria; la española que brindó una amplia gama cultural y que se mezcló con nuestros primeros habitantes brindándole una gran influencia castellana y la africana que llegó desde fines del siglo XVI, cobrando mayor notoriedad en los siglos XVII y XVIII debido a la abrupta manifestación azucarera y que influyó con sus cultos religiosos y otros elementos del lenguaje.
Todo los que nos engendró como pueblo, permitió la formación de un hombre diferente que se sintiera cada vez más alejado de España y África, pero que cada día se identificará más con el lugar donde nació, es decir, un hombre que superara los dogmas de las etapas que le precedieron, con un pensamiento propio, autóctono, en el que prevalece su amor por lo propio, a pesar de su ascendencia, ese hombre nuevo es el que conocemos como criollo.
Hoy, en las condiciones del mundo contemporáneo se hace cada vez más necesario propiciar el estudio de las raíces de nuestro pueblo y salvar su historia y la de la nación para lograr de este modo formar y consolidar valores en las nuevas generaciones y en la población en general; así se potencia la defensa de la Patria ante este mundo inmerso en una genocida guerra que solo traerá como consecuencia daños ecológicos y pérdidas de vidas humanas, civiles, que solo desean vivir en paz defendiendo sus tradiciones.
El estudio del proceso de formación del nuevitero y el cubano en general, ha presentado dificultades debido a la dispersión de la documentación que sobre el tema existe; por ello cobra cada vez más fuerza la conciencia que se tiene de la necesidad de sistematizar los estudios sobre el tema para que toda la población interesada en el tema, pueda ser acceder a los mismos, al brindar una información del proceso de conformación del ciudadano actual, haciendo énfasis en la influencia que tienen las diferentes culturas en este proceso, y de las diferentes posiciones que adopta en la lucha por alcanzar un mundo mejor y posible.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
a